Este proyecto desarrollado en el Instituto Tecnológico de Motores ITM se ha dado en el marco de la posibilidad, concreta, de poder contar con desarrollo propio de plataformas de vehículos deportivos con powertrain eléctrico que puedan diseñarse, construirse y desarrollarse comercialmente en el país bajo serie limitada y para uso exclusivo en circuitos.
Es muy importante entonces formar a los futuros diseñadores para que consideren las limitantes y las ventajas de poder generar productos con identidad propia, que luego de ensayo y validación se conviertan en producción local con perfil de alcance regional, o internacional.
Por eso experimentamos con uno de los cursos más aventajados de los últimos tiempos, la promoción que inició sus estudios en 2021 en plena pandemia y restricción, con clases virtuales y a distancia. Cuando les tocó la modalidad presencial desde el año pasado, dieron muestras de suficiencia y calidad como para encarar proyectos más ambiciosos. En este 2023 estamos concretando alguno de esos pasos, como este de diseñar propuestas para Track Day Cars.
La idea es que se encuentren con las exigencias de un chasis que esta formulado y construido solo para rodar por pistas, con una mecánica de alto rendimiento y una autonomía que se sacrifica en pos de la velocidad. Se parte de la premisa de mantener bajo el peso y de una carrocería con relativa baja sección maestra, con eliminación o mínima carga aerodinámica para reducir el arrastre y el consumo de potencia. El objetivo es sentir el viento en la cara, en forma segura, pasando una jornada divertida. También la premisa es poder compartir la experiencia, preferentemente con el diseño de cockpits biplaza.
Se han dado excepciones como el singular Prototipo H1 de Nicolás Herrera, ya presentado en esta nota. Sus compañeros de clase han optado todos por los vehículos de dos plazas, a pocos centímetros del sueño, solo escuchando el viento y la rodadura de los neumáticos contra el pavimento como toda manifestación de la tecnología. El tiempo dirá si estos proyectos alcanzan a desarrollarse, pero el camino hacia ese objetivo ya comenzó en los institutos de diseño. Los resultados los veremos muy pronto.
Texto y fotos: Carlos Alfredo Pereyra
Este biplaza con exoestructura ha sido diseñado pensando en el comportamiento de las suspensiones y en la dinámica del chasis. Despojado de ornamento esta 100% dedicado a la velocidad.
Este roadster cuenta con parte de su estructura expuesta y con una carrocería de estilo buggy de los años 70 en vibrante color de la época.
Este ha sido el Electric Track Day Car con menor tamaño. Sus dimensiones reducidas le permiten un comportamiento deportivo incluso en circuitos tipo kartodromo, demostrando gran adapatabilidad y facilidad para su transporte y estacionamiento.
Carrocería voluptuosa y de colores vibrantes, con un sistema de seguridad tipo HALO para su cockpit biplaza. Propuestas variadas en la entrega de ITM
Líneas estilizadas en esta barqueta de gran distancia entre ejes. La multiplicidad de propuestas es una de las mayores riquezas entre un grupo de estudiantes de diseño
Ruedas semiexpuestas y perfil en flecha. Otra singular silueta de la muy variada y rica propuesta proyectual de Diseño 3 en el Instituto Tecnológico de Motores.