En su nota de Opinión, "Un cambio de mentalidad", Renato Tarditti describió a la perfección lo que es la Ansiedad de autonomía en los autos eléctricos. Básicamente es ese miedo a quedarnos sin batería antes de llegar a algún punto de recarga, algo muy similar a lo que vivimos cuando pasamos de los viejos celulares a los primeros smatphones, y descubrimos que la batería no alcanzaba para todo el día.
Tarditti lo describe esa ansiedad perfectamente: “aquí va una de mis grandes conclusiones– manejar un auto eléctrico es administrar la escasez. Y no solo me refiero a la casi inexistente red de puntos de carga en Argentina (cosa que obliga a planificar muy bien los trayectos a riesgo de sufrir más de lo necesario); también tiene que ver con el recurso tiempo. Porque cargar razonablemente la batería (digamos un 85%) toma su tiempo, que puede ir de “solo” una hora, si tenemos acceso a un punto de carga ultrarrápido; a 5 horas en un cargador hogareño (de esos que salen U$S 6.000); a ¡50! o más horas en un enchufe común de tres patitas”.
Lo interesante es que, según estudios, como el realizado por la Universidad de Ginebra y publicado en la revista Nature Energy, en varios mercados esta ansiedad ha comenzado a disminuir. Las claves principales son simples, por un lado las baterías rinden cada vez más kilómetros; por el otro, cada vez hay más puntos de recarga, incluyendo los veloces. ¿Es solo eso? Al parecer hay más.
Según el estudio realizado a 2.000 conductores de vehículos a baterías en EUA y Alemania, el primer problema relacionado con la Ansiedad de autonomía tenía que ver con que los usuarios subestimaban la autonomía real de sus modelos 100% eléctricos. Alrededor del 30% confesó que creían que sus baterías no alcanzarían para su viaje diario. Según el mismo estudio, el 90% de los viajes se realizan dentro de distancias mucho menores a las que permiten las baterías y una vez entendido esto, mediante la experiencia de uso, los conductores comenzaron a relajarse.
En resumen, Renato Tarditti y otros usuarios de Argentina seguramente vivan una Ansiedad de autonomía mayor, ya que las distancias en nuestro país suelen ser grandes, pero sobre todo debido a la red de recarga bastante insuficiente. Sin embargo, sospechamos que acá sucederá lo mismo, primero, las distancias de uso diario son muy inferiores a la autonomía del modelo, por eso una vez que el usuario entienda cual es el alcance real de su vehículo y aprenda a planificar su trayecto, su experiencia será tan relajada como la cabina de un auto eléctrico.